Descubre este legado entre muros centenarios en Querétaro

Enclavado entre los imponentes muros del Convento de la Santa Cruz de los Milagros reposan siglos de historia y misterio. Parte de este venerable edificio ha abierto sus puertas al público, invitando a los visitantes a sumergirse en un viaje a través del tiempo. Entre los tesoros que aguardan, se encuentran la antigua cocina, la cámara de refrigeración natural y la celda-prisión de Maximiliano de Habsburgo, ofreciendo un vistazo único a la vida monástica del pasado.

El templo y convento de la Santa Cruz se alzan sobre la Loma del Sangremal, escenario legendario de la batalla entre los indígenas chichimecas y los conquistadores españoles en 1531. Según la narrativa local, en medio del conflicto, una cruz resplandeciente apareció en el cielo, acompañada por la figura de Santiago sobre un corcel blanco. En conmemoración, los franciscanos erigieron una cruz en el lugar, que luego evolucionó hasta convertirse en el convento y colegio de San Buenaventura, fundado en 1683, siendo uno de sus distinguidos alumnos San Junípero Serra.

Desde este histórico sitio, San Junípero Serra emprendió su labor evangelizadora, fundando 21 misiones que se extienden desde Querétaro hasta la Alta California. Su legado perdura en estas misiones, testigos silenciosos de la ferviente labor evangelizadora que marcó una época en la historia de la región.