Padres y madres de familia del Jardín de Niños “Esperanza Cabrera”, ubicado en el primer cuadro del municipio de Querétaro, manifestaron su preocupación ante la posible presencia de casos de COVID-19 entre docentes y alumnos del plantel.
Según testimonios, una maestra presentó síntomas desde principios de semana y posteriormente se ausentó por enfermedad respiratoria. Al menos dos docentes habrían mostrado síntomas compatibles con el virus, lo que despertó inquietud en la comunidad escolar, especialmente tras observarse fiebre, escurrimiento nasal y dolor de garganta en varios menores. Una madre señaló que el pediatra le informó sobre la circulación de una variante fuerte del virus en la zona.
El martes, solo siete de los 25 alumnos de un grupo acudieron a clases, lo que impidió realizar la fotografía oficial. Padres de familia denunciaron falta de transparencia por parte de la dirección del plantel, encabezada por la maestra Ermitina García Marín, ya que no se ha aclarado el número de casos ni las medidas concretas adoptadas.
En respuesta, el preescolar emitió un comunicado exhortando a implementar filtros sanitarios desde casa y evitar enviar a niños con síntomas. Además, se estableció el uso obligatorio de cubrebocas KN95 a partir del jueves y se reforzaron acciones de desinfección en casa y en la escuela. También se cerraron preventivamente dos salones por enfermedades transmisibles, sin especificar detalles.
Finalmente, se solicitó a los padres presentar un documento médico que respalde el diagnóstico en caso de enfermedad, como parte del protocolo interno. La comunidad escolar pidió mayor claridad por parte de las autoridades educativas municipales y estatales, así como vigilancia sanitaria constante para proteger a los menores.
