La Parroquia de Santa María de la Asunción, un majestuoso templo neoclásico que adorna el corazón de Tequisquiapan, es mucho más que un simple edificio religioso. Construida a principios del siglo XX y consagrada a Santa María de la Asunción, bajo la advocación de la Virgen de los Dolores, esta iglesia es un hito histórico y espiritual para los habitantes y visitantes del pueblo.
La devoción a la Virgen de la Asunción se remonta a los orígenes mismos de Tequisquiapan, cuando el pueblo aún era conocido como Santa María de la Asunción y las Aguas Calientes. Hoy en día, la parroquia continúa siendo un centro de fe y un punto de encuentro para la comunidad. Su elegante fachada en tonos rosas y blancos, así como su interior ricamente decorado, la convierten en una joya arquitectónica que cautiva a propios y extraños.
Dentro de la parroquia, destacan las capillas dedicadas a San Martín de Torres y al Sagrado Corazón de Jesús, que enriquecen aún más su valor histórico y religioso. La Parroquia de Santa María de la Asunción es, sin duda, un emblema de la identidad de Tequisquiapan y un testimonio del profundo arraigo de la fe católica en esta región.
