Por Luis Gabriel Osejo
Martín Arango, secretario de gobierno municipal de Querétaro que todavía encabeza en el gobierno de Luis Nava. Se perfila para ser el candidato único, de unidad dirían los priístas, para dirigir el Comité Directivo Estatal del PAN a partir del próximo diciembre.
En Martín confluyen los grupos políticos locales por lo que puede ser considerado que su unción forma parte de un acuerdo cupular.
Martín ha negado ser ‘anayista’ por Ricardo Anaya, la verdad es que en su carrera política también ha ‘tocado’ base con perfiles como Armando Rivera, Felifer Macías, el alcalde electo, Lupita Murguía, senadora y con el propio Nava.
También puede decirse que ha tenido un gran acercamiento con el hoy gobernador de Querétaro, Mauricio Kuri González quien lo ‘palomeó’ para los encargos que ha ocupado Martín desde el 2021.
Sin embargo, hay que decirlo, se percibe que el gobernador sacó las manos del proceso y les dijo a todos los grupos del poder en Querétaro ‘ponganse de acuerdo entre ustedes’.
En realidad el PAN, o la dirigencia estatal del PAN, siendo gobierno, no tiene gran influencia en las decisiones.
Siempre ha sido así con los partidos en el poder, una oficina más del Poder Ejecutivo, que hará lo que se le ordene y se le pida desde el Palacio de Gobierno.
Aún así, la dirigencia estatal, históricamente, les da el pase a los líderes para convertirse, vía plurinominal en diputados locales. Como sucedió con Leonor Mejía que dejará el encargo para ocupar una curul.