El secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken, anunció que su país no reconoce a Nicolás Maduro como presidente de Venezuela, calificando su toma de posesión como ilegítima. En su lugar, declaró a Edmundo González Urrutia como el legítimo ganador de las elecciones presidenciales del 28 de julio de 2024 y exigió que sea juramentado como nuevo mandatario.
Blinken señaló que el Consejo Nacional Electoral (CNE), controlado por el chavismo, proclamó de manera fraudulenta la victoria de Maduro, a pesar de las pruebas de la oposición que confirmarían el triunfo de González Urrutia.
La administración de Joe Biden aumentó a 25 millones de dólares la recompensa por información que conduzca a la captura de Nicolás Maduro, a quien acusan de narcotráfico, y ha implementado sanciones económicas contra 187 personas vinculadas al líder chavista.
Asimismo, el Gobierno de EE. UU. extendió por 18 meses el Estatus de Protección Temporal (TPS) para venezolanos en su territorio, debido a la grave crisis humanitaria que enfrenta Venezuela.
Estados Unidos reiteró su compromiso con la democracia en Venezuela, asegurando que apoyará una transición pacífica y democrática liderada por el presidente electo, Edmundo González Urrutia.