Esta mañana, el presidente Andrés Manuel López Obrador destacó que no hay «ninguna certeza» sobre la llegada del huracán Beryl a México ni sobre la intensidad con la que podría impactar. En su conferencia de prensa, el mandatario aseguró que ya se están tomando medidas preventivas y pidió a la población mantener la calma, ya que aún no se sabe si el huracán mantendrá su intensidad, su dirección o cuándo exactamente tocará tierra.
López Obrador señaló que, aunque el huracán aún está lejos de las costas, se está evaluando una posible entrada por el estado de Quintana Roo. En este sentido, informó que el Ejército y la Marina ya están trabajando en la zona junto a la gobernadora Mara Lezama. Según el presidente, se prevé que el huracán podría llegar pasado mañana, el jueves.
En cuanto a la posibilidad de evacuaciones, el presidente enfatizó la importancia de proteger las vidas humanas, recordando que «lo material siempre se recupera». También sugirió que aquellos con familiares en zonas altas consideren trasladarse allí. Advirtió sobre el sensacionalismo y la información que podrían surgir en los próximos días, y aseguró que durante sus conferencias matutinas mantendrá informada a la población sobre el desarrollo del huracán.
