El nivel de la presa Zimapán registró un leve descenso, pasando del 101.3% al 101.1% de su capacidad entre el sábado 11 y este lunes 13 de octubre, luego del desfogue controlado implementado para reducir la sobrecarga del embalse, informó la Comisión Estatal de Aguas (CEA).
De acuerdo con la dependencia, esta medida fue ordenada por la Comisión Nacional del Agua (Conagua) tras alcanzar el embalse su nivel máximo de almacenamiento, con el objetivo de proteger la infraestructura hidráulica y a las comunidades aledañas. Como parte de este proceso, se prevé la suspensión temporal del Sistema Acueducto II, que abastece de agua a diversas localidades de la región.
Durante el desfogue, el nivel del agua desciende aproximadamente un centímetro por hora, y se mantiene una extracción programada cercana a los 500 metros cúbicos por segundo. La CEA aseguró que el monitoreo del embalse es constante y que cualquier ajuste en las operaciones del Acueducto II se realizará conforme a las indicaciones de Conagua.
Asimismo, la dependencia estatal destacó que la suspensión del servicio será programada y notificada con anticipación a los usuarios para evitar mayores afectaciones.
Las autoridades reiteraron que el desfogue controlado busca garantizar la seguridad estructural de la presa y prevenir riesgos en las zonas cercanas, por lo que continuarán supervisando los niveles hasta restablecer su capacidad normal de operación.
