En un nuevo episodio de tensión política, el presidente municipal de Querétaro, Felifer Macías, respondió enérgicamente a las críticas del presidente del Senado, Gerardo Fernández Noroña, quien recientemente cuestionó el proyecto urbano de El Batán y al gobernador Mauricio Kuri. Felifer calificó la actuación de Noroña como una “vergüenza” y lo tachó de “payaso ardido” que recurre a los insultos porque sabe que está perdiendo terreno político, especialmente en un estado como Querétaro, donde —según sus palabras— “las cosas se hacen bien y con respeto”.
Macías minimizó la manifestación encabezada por el senador, indicando que asistieron menos de 30 personas y que su impacto en la ciudadanía fue nulo. También subrayó que Querétaro se distingue por su respeto y orden, a diferencia de otras regiones gobernadas por Morena. La respuesta de Noroña contó con el respaldo del legislador federal Gilberto Herrera y el regidor Fernando Flores, lo que confirma que la confrontación por El Batán no solo es técnica o urbana, sino profundamente política y con miras al reacomodo de fuerzas rumbo a 2027.
Esta disputa ilustra con claridad el inicio de una estrategia de Morena para intentar penetrar un bastión panista como Querétaro, mientras el PAN, en voz de sus liderazgos locales, deja claro que no piensa ceder ni un centímetro sin confrontar.
