El ex obispo de Querétaro y actual arzobispo de Durango, Faustino Armendáriz Jiménez, fue atacado ayer por un hombre armado con dos cuchillos en la sacristía de la Catedral Basílica Menor. El incidente ocurrió al término de la misa de las 12:00 horas, pero afortunadamente el arzobispo resultó ileso.
Según relató el propio Armendáriz, el agresor sorprendió al ingresar a la sacristía y le preguntó si era Faustino. En ese momento, intentó apuñalarlo, pero no logró herirlo. El arzobispo calificó el incidente como un intento de asesinato y expresó su tristeza ante el hecho. Aunque desconoce al agresor, supone que tiene problemas con la Iglesia. Tras el ataque, el hombre fue detenido con la ayuda de otros religiosos y fieles presentes, mientras el arzobispo le ofrecía su perdón y le deseaba bendiciones de Dios.
A pesar del susto, Faustino Armendáriz retomó su agenda de trabajo después de unos minutos de descanso. Cabe mencionar que esta no es la primera vez que el arzobispo es objeto de agresiones, ya que anteriormente recibió amenazas telefónicas en su etapa como obispo en Tamaulipas por defender a los migrantes. Sin embargo, esta fue la primera vez que enfrentó un ataque físico directo.
