El presidente municipal de Querétaro, Felifer Macías, fue contundente: quien difunda o reenvíe la ubicación de los puntos de alcoholimetría puede ser sancionado. A través de la Policía Cibernética y personal de la Secretaría de Gobierno, se están monitoreando redes sociales y grupos de WhatsApp para identificar a quienes alertan sobre los operativos. Aunque no se ha especificado el monto de la multa, el mensaje es claro: están recabando evidencia y habrá consecuencias. El objetivo del programa de alcoholimetría es salvar vidas y prevenir accidentes.
