Durante una conferencia de seguridad encabezada por Claudia Sheinbaum, el secretario Omar Harfuch informó que el alcalde de Chilpancingo, Alejandro Arcos, no contaba con protección de la Guardia Nacional antes de su asesinato, aclarando que no se le negó dicha protección, sino que nunca la solicitó formalmente.
Harfuch detalló que, para que un funcionario público reciba protección, es necesario que dicha petición sea presentada a la Secretaría de Seguridad, quien posteriormente canaliza la solicitud a las áreas correspondientes, como la Guardia Nacional. En el caso de Arcos, no hubo ninguna solicitud de protección por parte del edil ni de otras instituciones.
Alejandro Arcos fue asesinado cuando se dirigía solo a una reunión, según Harfuch, aunque no se revelaron más detalles sobre el encuentro debido a que la investigación sigue en curso.