El diputado queretano del Partido Revolucionario Institucional (PRI), Paul Ospital Carrera, presentó una iniciativa para la creación de una Ley Estatal de Agresores Sexuales, que contempla un Registro Estatal de Agresores Sexuales como herramienta clave para identificar y perseguir a quienes cometen este delito.
El legislador explicó que la propuesta busca implementar políticas públicas que no solo brinden atención a las víctimas de violencia sexual, sino que también estigmaticen a los victimarios, comparando este impacto con el daño permanente que sufren las víctimas, especialmente niñas, niños y adolescentes.
“La esencia de esta propuesta es ponerles un ‘tatuaje’ que los identifique de por vida. A pesar de que cumplan una condena, queremos que quede claro que fueron abusadores sexuales, porque las víctimas cargan con ese tatuaje toda su vida”, destacó Ospital Carrera.
Impacto del registro en los agresores
El legislador subrayó que estar en el registro podría restringir ciertos trámites burocráticos, similar a cómo funcionan las leyes contra deudores alimentarios. Sin embargo, el acceso a esta lista estaría limitado exclusivamente a las autoridades en materia de justicia y al gobierno estatal.
Datos alarmantes sobre el abuso sexual infantil
Según Ospital Carrera, el 70 % de los casos de abuso sexual infantil son perpetrados por familiares cercanos, lo que convierte al hogar en el lugar más peligroso para los menores en este contexto. El 20 % de los casos ocurre a manos de conocidos, y solo el 10 % proviene de desconocidos. Además, se estima que en México 1 de cada 5 niños es víctima de abuso sexual, pero solo el 2 % de los casos llega a denunciarse.
“El abuso sexual infantil es el crimen encubierto más extendido de toda la historia, porque ocurre en el seno del hogar, y la cultura de no denunciar, especialmente cuando el agresor es un familiar, perpetúa la impunidad”, indicó.
Colaboración con organizaciones civiles
La iniciativa contó con el apoyo de organizaciones como Corazones Mágicos, que este mes atendieron a 250 menores víctimas de abuso sexual. En caso de aprobarse, Querétaro se convertiría en la tercera entidad en el país en implementar un registro estatal de agresores sexuales.
Con esta propuesta, se busca visibilizar y combatir uno de los delitos más ocultos y extendidos, garantizando justicia y protección para las víctimas.