El Congreso de Querétaro aprobó una reforma al Código Penal del estado para endurecer las penas por usurpación de funciones en el ámbito de la salud, así como para quienes realicen cirugías o procedimientos quirúrgicos sin autorización, con castigos que van de 2 hasta 12 años de prisión.
El diputado Guillermo Vega Guerrero, presidente de la Comisión de Administración y Procuración de Justicia, explicó que la agravante aplicará a quienes ejerzan sin licencia profesiones médicas y de salud, como medicina, odontología, enfermería, psicología, nutrición y veterinaria, entre otras. En estos casos, la pena será de 2 a 6 años de prisión, además de una multa de 250 a 400 días de salario.
Esta reforma busca proteger la salud pública y evitar que personas sin formación profesional pongan en riesgo la vida y bienestar de los ciudadanos.
