El gobernador de Querétaro, Mauricio Kuri González, expresó su preocupación ante el recorte de 350 millones de pesos en el presupuesto federal de salud. Este ajuste afectará áreas clave como el suministro de medicamentos, mantenimiento hospitalario y contratación de personal médico.
Kuri calificó esta decisión como «un golpe fuerte» para el sistema de salud estatal, señalando que podría limitar la capacidad de respuesta ante emergencias y retrasar proyectos cruciales. Sin embargo, afirmó que su administración buscará alternativas para mitigar el impacto y proteger a la población queretana.
El mandatario destacó que estas restricciones financieras complicarán las operaciones de hospitales y clínicas, afectando directamente la atención a los pacientes.