El senador del PAN, Ricardo Anaya Cortés, rechazó la necesidad de endurecer sanciones penales tras el descubrimiento de un rancho en Teuchitlán, Jalisco, presuntamente usado como campo de concentración por el crimen organizado.
Anaya afirmó que el problema no es la falta de leyes, ya que los delitos cometidos en ese lugar, como desaparición forzada, privación ilegal de la libertad, homicidio y tortura, ya están tipificados con penas de hasta 100 años de prisión.
Criticó la inacción de las autoridades y destacó el papel de las madres buscadoras en la revelación del sitio. “Es increíble que tenga que ser la sociedad civil la que saque a la luz estas tragedias. No hay nada que festejar, es un jalón de orejas para todos los niveles de gobierno”, declaró.