En 2024, el Ejército destinó 317 millones de pesos para promocionar sus hoteles en el sureste mexicano, superando 27 veces el presupuesto de la Secretaría de Turismo para difusión y 207 veces el de la SEP para promoción de la lectura.
A pesar de la inversión en campañas en radio, televisión, redes sociales y transporte público, los hoteles administrados por Sedena tuvieron menos del 50% de ocupación en su primer periodo vacacional. El de Tulum Aeropuerto, por ejemplo, apenas recibió a 56 huéspedes en diciembre, ocupando solo el 17% de su capacidad.