El Templo del Espíritu Santo, ubicado en la calle Arteaga No. 70, es uno de los recintos históricos más antiguos de Querétaro. Construido alrededor de 1550 por Don Diego de Tapia, su origen está ligado a la evangelización de los pueblos originarios, inicialmente funcionando como una capilla abierta o de indios.
Un punto clave en la evangelización
Se dice que desde este templo partió Fray Junípero Serra, una figura central en la evangelización de México y Estados Unidos. Primero, llevó su misión a la Sierra Gorda queretana y, posteriormente, a la Alta California, donde dejó un legado duradero entre los pueblos nativos.
Un testigo del pasado
El Templo del Espíritu Santo no solo es un ejemplo arquitectónico del periodo colonial, sino también un símbolo de la historia religiosa y cultural de Querétaro. Su ubicación en el corazón de la ciudad lo convierte en un destino imperdible para quienes desean conectar con el pasado de la región.
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