El expresidente estadounidense Donald Trump confirmó que planea imponer una nueva ronda de aranceles al sector automotriz a partir del 2 de abril, retrasando su implementación por un día para evitar coincidir con el Día de los Inocentes.
Desde el Despacho Oval, Trump explicó que la medida responde a su política de “aranceles recíprocos”, buscando igualar las tarifas que otros países aplican a productos estadounidenses. Aunque los nuevos aranceles no entrarán en vigor de inmediato, podrían implementarse en las próximas semanas o meses, afectando primero a los países con los que EE.UU. mantiene un mayor déficit comercial.
Trump defendió su decisión como un asunto de «justicia económica», asegurando que Estados Unidos cobrará a otras naciones lo mismo que ellas aplican a sus productos. Este movimiento se enmarca dentro de su estrategia proteccionista para fortalecer la industria estadounidense y equilibrar el comercio internacional.