El presidente municipal de Tolimán, Alejo Sánchez, destacó los desafíos que enfrenta su administración para sacar al municipio del rezago económico e impulsar su crecimiento. A sus 34 años, y con una trayectoria de 10 años en el Ejército, Sánchez decidió entrar en la política con el propósito de cambiar la historia de su pueblo.
En entrevista, el alcalde señaló que Tolimán necesita apoyo urgente de los tres niveles de gobierno y de la sociedad civil, ya que recibió un municipio en condiciones críticas, con un presupuesto de 254 millones de pesos, del cual el 80% se destina a nómina.
Sánchez destacó que la principal fuente de ingresos de la población proviene de las remesas enviadas por migrantes en Estados Unidos, lo que lo lleva a impulsar el turismo como motor económico, aprovechando la riqueza cultural y tradicional del municipio. “Tolimán es un mar de oportunidades, pero ha sido víctima de la pobreza mental de sus gobernantes”, afirmó.
El alcalde reconoció que su administración no tendrá tiempo suficiente para transformar el municipio por completo, pero aseguró que su prioridad es dejar bases firmes para que Tolimán no vuelva a caer en el abandono. “No me importan los colores, lo único que quiero es ver a Tolimán bien”, concluyó.