Por Griselda Osejo Ugalde Fotos: Fabián de la Vega Producción: Juan Espinoza
Nos encontramos con ella en el Salón del Pleno del Congreso del Estado, al sur de la ciudad. Dulce Imelda Ventura Rendón, diputada local por el I Distrito, nos habla de sus triunfos, pero también de sus fracasos.
Su familia, sus hijos -con valores y principios- son el mayor de sus éxitos dice emocionada mientras recuerda los duros momentos que pasaron cuando su esposo se contagió de Covid19, casi al principio de la pandemia.
Dulce también considera un éxito ser diputada, pero no por el cargo o el membrete sino por la oportunidad que tiene de servirle a los demás, a los adultos mayores y a los niños desde la Comisión de Salud que encabeza en la LX Legislatura ‘Es un privilegio servir a quienes más falta les hace, es un privilegio servir a mi estado’.
Abogada por la Universidad Autónoma de Querétaro, con especialidad en amparo, derecho notarial y derecho constitucional, Dulce Ventura se ha mantenido muy cercana no sólo a la gente de su distrito sino a todos los queretanos pues está convencida de que más allá de su trabajo parlamentario, en donde se destaca por ser de las más activas, está el escuchar y ayudar a la gente que le pide apoyo.
Por eso, en su primer informe, que por cierto realizó en el icónico Mercado del Tepetate, habló de haber dado millones de pasos para encontrarse con los queretanos.
En la entrevista, la diputada también reconoce que ha fracasado en muchas ocasiones pero que esos fracasos son los que la han llevado a estar donde está. ‘El fracaso es parte del éxito, no lo entiendo de otra manera. Cuando fracaso, cuando no logró lo que busco, lo vuelvo a intentar, y creo que los atletas son el ejemplo perfecto para identificar o ligar el éxito con el fracaso. Ellos se caen, pero se levantan hasta conseguir el triunfo. Creo que el éxito y el fracaso van juntos’.
Dulce Ventura es una de las panistas que pueden ser consideradas como un ‘activo’ del Partido Acción Nacional.
