Al explorar las dunas rojas de El Madroño, en la Sierra Gorda Queretana, uno podría sentirse transportado a otro planeta. Este lugar no solo deslumbra por su belleza natural, sino que también tiene una profunda relevancia histórica y cultural, ya que alberga una gran cantidad de fósiles marinos y vestigios prehistóricos. La presencia de estos fósiles a tanta altitud suscita una pregunta intrigante: ¿cómo llegaron hasta allí?
La explicación radica en la historia geológica de la región. Hace millones de años, estas tierras estaban sumergidas bajo el mar, lo que permitió la acumulación de fósiles marinos que hoy en día son objeto de estudio por paleontólogos y científicos de todo el mundo. Este fascinante sitio está abierto al público, aunque es crucial que los visitantes respeten la zona y eviten llevarse fósiles como souvenirs. Con las cámaras de nuestros teléfonos, es fácil capturar y compartir la maravilla de este lugar sin dañarlo.
Ubicado en el Municipio de Landa de Matamoros, El Madroño es un destino imperdible en cualquier viaje a la Sierra Gorda de Querétaro. A tan solo 33 minutos del pueblo de Landa y a una hora de Jalpan, donde se pueden encontrar varias opciones de alojamiento y áreas para acampar, este sitio ofrece una experiencia única que combina aventura, historia y respeto por el patrimonio natural mexicano.