Desde 1962, Tacos Panchito ha sido mucho más que un puesto de tacos; es un emblema de la gastronomía queretana. Don Francisco Padilla, originario de Jalisco, llegó a Querétaro con una receta familiar y un sueño. Comenzó en el andador Matamoros y, tras varios cambios, encontró su hogar definitivo en el mercado Hidalgo, donde por más de 40 años ha deleitado a generaciones de comensales.
Los tacos de cabeza, cocidos al vapor con maestría, ofrecen un abanico de sabores únicos: trompa, cachete, lengua, nervio, sesos y más, servidos en tortillas de maíz calientes y acompañados de cilantro, cebolla y una imperdible salsa verde martajada. Este manjar no es solo comida, es un ritual nocturno en Querétaro, donde familias y amigos se reúnen en torno al puesto, ahora atendido por Juanita y Javier Padilla, los hijos de don Francisco.
Tacos Panchito no solo alimenta el cuerpo, sino también el alma, siendo un punto de encuentro donde la tradición y el sabor se mantienen vivos con cada taco servido.