El gobierno de Donald Trump recibió en custodia a 29 integrantes de cárteles de la droga mexicanos, recientemente designados como organizaciones terroristas extranjeras. Entre ellos se encuentra Rafael Caro Quintero, fundador del Cártel de Guadalajara, para quien se solicita pena de muerte o cadena perpetua, informó el Departamento de Justicia de EE.UU. (DOJ).
También fue extraditado Daniel Franco López, alias «Micha, Neon y Fe», considerado un alto mando del Cártel de Sinaloa.
El DOJ destacó que los extraditados incluyen líderes y operadores de los cárteles de Sinaloa, Jalisco Nueva Generación (CJNG), Noreste (antes Los Zetas), Nueva Familia Michoacana y el Cártel del Golfo. La fiscal general Pamela Bondi reafirmó la postura de Trump: “Los cárteles son grupos terroristas y serán enjuiciados con todo el peso de la ley”.
La decisión del gobierno de Claudia Sheinbaum fue aclamada por las agencias de seguridad estadounidenses como una clara señal de cooperación con la administración Trump. Sin embargo, en la Casa Blanca hay debate sobre la estrategia: algunos funcionarios abogan por acciones militares unilaterales contra los cárteles, mientras otros prefieren una postura más cautelosa para evitar tensiones con México.
