Por Viri Barrera De Santiago Imagen: Gobierno de Querétaro
Transcurría la noche del veintidós de octubre de dos mil veintidós, en la que los puentes que por más de 40 años sostuvieron la circulación del centro del país, desde nuestro hermoso Querétaro, fuesen derribados para renacer.
Ya falta poco para que los queretanos seamos referente nacional, gracias a la magna obra de “Paseo 5 de Febrero”, en la que peatones, ciclistas, automovilistas, así como usuarios del transporte público, nos beneficiemos de las amenidades con las que ha sido proyectada. No es menos importante para los transportistas que a diario transitan esta arteria vial, pues representa mayor agilidad en sus actividades, favoreciendo el comercio principalmente de nuestro país.
Pero, porqué es una obra sustentable. Debemos recordar que el Plan Estatal de Desarrollo 2021-2027 en su eje “Medio Ambiente e Infraestructura Sostenible”, establece ordenar, cuidar y vigilar el equilibrio ecológico, proyectando infraestructura y desarrollo para el presente y futuro del estado, a fin de mejorar las condiciones de vida de la ciudadanía, lo que es posible teniendo como base la implementación de una economía circular.
Y justamente, esta moderna obra ha considerado desde su planeación, apegarse a la normatividad vigente que regula el tratamiento adecuado de los residuos de la construcción y demolición, contribuyendo también al cumplimiento del objetivo 9 de desarrollo sostenible contenido en la agenda 2030, construyendo vialidades resilientes y sostenibles.
Es así que, la innovadora estrategia de recuperación de materiales como tepetate, concreto y varilla ha permitido que, para agosto del presente año, ya se haya reciclado 214, 500 toneladas de dichos residuos utilizados en banquetas o vialidades de bajo peso de la misma obra, asimismo, las trabes retiradas podrán servir en otros proyectos constructivos para la infraestructura necesaria en los municipios de la entidad, llevando a Querétaro al siguiente nivel.
