Revista

Diana Carolina López, autorreflexión hecha arte

Texto y fotos: Demian Chávez

La pintora Diana Carolina López prepara su paleta de color, ha hecho pruebas de tonos y  ha decidido que colores estarán en su nuevo óleo. Vigilante como cual critico de arte está  Mukti, su gato. Él mira y escudrina como se va iluminando la pieza de arte. Ella se ha especializado en el género del retrato al óleo. Al tiempo ha desarrollado métodos de  pintura que comparte generosamente en el Jardín de la Musa, su estudio, con los alumnos  que desean aprender a pintar.  

El arte ha sido un elemento que le acompaña de toda la vida. Comparte con Ciudad y Poder que “fue algo muy natural. Desde niña me gustaba crear, usaba la pasta de dientes  a la que le agregaba gis en polvo de colores para hacer mi propia pintura”. 

Su formación académica ha sido en diseño gráfico aunque su interés más grande siempre  fue el arte, “así que en cuanto pude fui soltando la parte digital para tomar diplomados y  cursos de pintura con reconocidos artistas tanto en México como en el extranjero,  especialmente NY”. Por lo tanto no es una artista improvisada.  

¿Porque elegiste el género del retrato y no otros como el paisaje o el abstracto? 

Mi obra proviene de autorreflexiones acerca de elementos humanos que nos mueven a vivir relacionándonos unos con otros y a generar complejas estructuras tanto psicológicas como sociales para lograrlo. Estos motores y estructuras compartidas reconforman nuestra identidad, entrando en juego la dualidad, a veces contradictoria, entre el ser individual y el ser social. El reto de mi trabajo es otorgarle forma visual a estos latentes pero invisibles procesos que todos compartimos. 

Por segunda ocasión uno de sus retratos viaja como finalista a España luego de ser  seleccionada en Modportrait 2022. Este es uno de los concursos más prestigiosos a nivel  mundial. Ya el año pasado también seleccionaron un trabajo suyo. Comparte que “fue una  gran sorpresa cuando volví a ver mi nombre en la lista de este año”. 

En 2022 tuvo la oportunidad de viajar para estar en el evento de inauguración y fue una  emoción tan grande, que se conmovió hasta las lágrimas. Precisa que es muy emocionante  ver la pintura en el MEAM, uno de los recintos más importantes del arte figurativo  contemporaneo, y “acompañada de artistas que me han inspirado y a los que he admirado  por mucho tiempo, fue una experiencia inolvidable”. 

Mukti brinca a la mesa de trabajo, observa, huele y da permiso de seguir pintando a la  artista en su patio.

Artículos relacionados

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Back to top button